La primera ciudad que visité de Japón fue Osaka, la tercera ciudad más grande después de Tokyo y Yokohama. Te digo que llegar al aeropuerto ya fue un impacto.
La cordialidad al llegar a Japón fue como nunca había sentido en otro país que visite. Me esperaban un transfer que me llevó al hotel en el centro de la ciudad. Las grandes avenidas de las afueras de la ciudad que contrastan con lo estrecha de sus calles en el downtown.
Increíble la vida nocturna y la oferta de comida callejera en el barrio de Dotonbori. Las luces de los carteles luminosos eran increíbles pero lo que me llamó la atención fue un cartel con un hombre corriendo con el nombre Glico que representa a una marca de golosinas con una curiosa historia.
Resulta que en los años 20 el fundador de la compañía experimentó producir alimentos más saludables, especialmente golosinas para niños, a partir de la extracción de glucógeno de las ostras. Esta sustancia sirve como almacenamiento de energía en las personas y de allí su nombre Glico, hoy icono de la ciudad de Osaka, donde los turistas aprovechan a sacarse fotos con él.
Una de las visitas obligadas y realmente impactante, es el Castillo de Osaka, construido en 1583 con una dramática historia de destrucción y reconstrucción. Construido en altos sobre piedra, desde donde se puede observar gran parte de la ciudad.
Desde Osaka, la visita obligada es Nara, una ciudad con importantes templos. Me impactó el templo de Todai ji con un Buda hecho en bronce de 15 m. que se exhibe en un salón de madera.
En la entrada vagan libremente ciervos protegidos pues son tesoros nacionales, y se consideran mensajeros de los dioses por el sintoísmo. Se les puede dar de comer unas galletas especiales, similares a las obleas, que se compran en el parque.
Sobre la comida del lugar, hay para todos los gustos, algunas tradicionales son: Tako tamago, una especie de brochete de pulpo con huevo de codorniz, el cangrejo, el Kitsune Udon, un cuenco de fideos con una porción de tofu, el Tsukune, un albóndiga de carne de pollo rellena de queso que se come con huevo crudo y salsa de soja, entre otras.