Luego de pasar unos días en Roma, y a 2 horas de vuelo, llegué a Atenas. Quizás la expectativa no era muy alta para mi, pero la superó ampliamente.
Descubrir una ciudad considerada una de las más antiguas habitadas de Europa (3000 a.c.) que hoy es el centro principal de la movida cultural, económica y política de Grecia.
Lo primero que visité fue la Plaza Sintagma, que es el centro neurálgico del país . Rodeada de movidas avenidas y con el Parlamento y la tumba del Soldado Desconocido en ella.
Sobre uno de sus laterales pude apreciar el Hotel Grande Bretagne el mas lujoso de Atenas donde familias reales y famosos se alojaron allí.
No menos animada, la Plaza Monastiraki, es otro punto donde artistas callejeros suelen hacer bailes, cantos y entretenimientos.
Desde allí y caminando no más de 10 minutos se llega al barrio de Plaka . En la trayectoria hay pequeñas tiendas de artículos locales y souvernirs, muy entretenido.
Muy conmovedor es la visita a la Acropolis con el Partenon, Erection, Propileos y el Templo de Atenea . A pesar de verlos en diferentes folletos y videos, estar allí y contemplarlos realmente conmueve.
Y si de vida nocturna hablamos: además de Plaka y Monastiraki, los barrios de “Psirri”, considerado el barrio hípster de Atenas y “Gazi” cuyos orígenes fue una antigua planta industrial por el año 1857 y una vez cerrada en 1984 convirtiéndose en un centro con galerías de arte, cafés, restaurante y Música en vivo.